Este 27 de noviembre, el Dpto. de Creación Literaria celebra 37 años de labor lanzando esta antología de cuentos premiados.
El Taller de Escritores de la Universidad Central (TEUC) cumplió este año 37 años de labores ininterrumpidas. Para celebrar su aporte en la formación de escritores, el Departamento de Creación Literaria ideó la antología Escritores que cuentan: 35 años del TEUC, tomos 1 y 2, como una muestra de lo realizado en el taller en estas décadas y del desarrollo de la cuentística nacional.
El TEUC fue fundado por el maestro Isaías Peña, quién aún lo dirige. “Siempre lo he pensado como un laboratorio de experimentación de los procesos de creación literaria, ese es su objetivo primordial”, comenta.
Este espacio es la evolución de las antiguas tertulias que organizaban los escritores —consagrados y aspirantes— en las que se discutían ideas y textos de sus participantes, “en el 81 solo había un taller en Colombia, el de Manuel Mejía Vallejo en Medellín, nosotros llenamos ese vacío en Bogotá”, agrega Peña.
El libro —que fue presentado en la más reciente Filbo— será lanzado el martes, 27 de noviembre, en el Aula Múltiple de la Sede Centro a las 6:00 p. m.
En el evento intervendrán el maestro Isaías Peña, Óscar Godoy Barbosa, Sonia Ramón, César Augusto González, Gloria Inés Peláez, Diana Alexandra Perico y Jerónimo García Riaño.
La antología
Desde su creación, a mediados de junio de 1981, el TEUC tuvo un recurso académico-literario para determinar su validez, rendimiento y vigencia, que luego se convertiría en el instrumento predilecto de la evaluación permanente, cuyo uso se extendería a los herederos posteriores: el pregrado y posgrado de Creación Literaria. Aquel recurso, autónomo y ajeno a la dirección misma del TEUC, fue el concurso literario, reza el prólogo de esta edición.
De este recurso se sirvió Peña, también editor de la publicación, para seleccionar un cuento de cada escritor egresado que ha recibido algún tipo de reconocimiento en los más de 30 años de trabajo continuo —cumplidos en 2016—.
“Siempre he mantenido una base de datos que nos permita llevar una estadística de la producción literaria de los egresados, no la genérica total, sino la premiada, pues los reconocimientos son una manera de evaluar también al TEUC”.
Dar visibilidad a sus muchachos, como llama afectuosamente a los egresados del Taller el maestro Peña, —aunque algunos puedan ser sus contemporáneos—, ha sido uno de los objetivos principales no solo de esta edición, sino del Taller en general.
Este homenaje al Taller, constituido por su propia obra, también tiene como propósito mostrar un panorama de 30 años del cuento colombiano, avalado por concursos internacionales, nacionales, regionales, locales y unicentralistas, y dejar un registro concreto de la narrativa de este periodo que pueda ser estudiado eventualmente.
“Con esta antología queremos, además, dejar constancia del trabajo investigativo en creación literaria que se ha desarrollado tanto en su programación académica como en su planteamiento pedagógico y didáctico”, agrega Peña.
El TEUC
“La idea es que la gente entre al Taller y se enamore de la literatura. Que entienda las ventajas de este sistema y entre a hacer la carrera”, explica Peña sobre los motivos de este proyecto que, gracias a su larga y reconocida trayectoria, se ha convertido en una institución en la ciudad.
El Taller se concentra en el estudio del cuento, pues es el formato que mejor se presta para desarrollar en el tiempo con el que se dispone. “La idea es que los participantes tengan contacto con la totalidad de estilos y géneros, para que tengan un gran panorama y sean libres de quedarse con lo que les gusta”.
Se desarrolla en tres franjas. Una en la que se hacen ejercicios sobre técnicas literarias, en la que los estudiantes ven poca teoría y se dedican a hacer pastiches de algunos narradores icónicos. La segunda es una lectura ordenada de textos que datan de 1400 a los años 2000, en ella se escogen autores canónicos de cada escuela de la literatura universal para ver la evolución y las variaciones en la narrativa. Finalmente, los participantes hacen sus propios textos para ser discutidos en clase.