En el marco del 29.° Rock al Parque, el festival gratuito más grande de Latinoamérica, llega la cuarta edición de Rock Sinfónico, un concierto que une el poder del rock colombiano con la fuerza expresiva de una camerata sinfónica, y el respaldo técnico de Groove Music Studios, reconocido por su trabajo con artistas como Aterciopelados y Carlos Vives. 

El concierto será el 20 de junio, de 7:00 a 9:00 p. m. en el emblemático Teatro México de la Universidad Central, con apertura de puertas desde las 5:30 p. m. y entrada libre para mayores de 14 años hasta completar aforo. Los menores de 14 años podrán entrar acompañados de un adulto responsable. Si deseas asistir al concierto, por favor regístrate aquí.

La directora de la Escuela de Artes de la Universidad Central, Luz Dalila Rivas, explicó que este proyecto, liderado por el programa de Estudios Musicales, es una residencia artística que vincula a estudiantes, docentes, egresados y profesionales del sector musical y “destaca por su propuesta formativa, artística e intersectorial que celebra la creatividad, el talento y la colaboración”.

Rock Sinfónico hace parte de las actividades descentralizadas de Rock al Parque 2025 y del programa Bogotá, Mi Ciudad, Mi Casa de Idartes, lo que permite amplificar su impacto cultural y conectar con nuevos públicos.

Rock Sinfónico es una vitrina para la creación joven y un modelo de articulación entre la Universidad, el sector productivo y la vida cultural de Bogotá. En esta edición participan:

Cuatro bandas colombianas:

• Mad Tree: rock alternativo con fuerza lírica y presencia internacional (Vive Latino, Grito Latino, Rock al Parque).
• Epilepsia DC: metal experimental con trayectoria internacional y propuesta sonora vanguardista.
• NEO: rock clásico renovado desde la Universidad Central, con una mirada fresca y potente del pasado sonoro.
• Los Pangurbes: fusión entre ritmos del Pacífico, funk, rap y afrobeat, con enfoque social y estético propio.
  
  

Aliados estratégicos:

• Sinfonietta Academy: camerata sinfónica de 20 músicos, con enfoque de excelencia artística y compromiso social.
• Groove Music Studios: estudio de grabación reconocido internacionalmente, encargado del registro sonoro multitrack.
• Idartes: a través de su programa Bogotá, Mi Ciudad, Mi Casa, incorpora este evento a las actividades descentralizadas de Rock al Parque.

Con esta iniciativa, la Universidad Central reafirma su compromiso con la cultura como una forma de transformación social. Al abrir sus escenarios y espacios académicos a artistas, gestores y públicos diversos, no solo potencia el talento joven y la formación musical, sino que se integra al pulso creativo de Bogotá. Por ello, Rock Sinfónico es también una expresión del rol activo que pueden asumir las universidades en el fortalecimiento del ecosistema artístico de la ciudad.

Este concierto es más que una puesta en escena: es un espacio de creación, formación y circulación para artistas emergentes, que fortalece el tejido cultural de Bogotá y proyecta nuevas voces del rock colombiano, donde el repertorio del rock independiente se enriquece con la sonoridad de una camerata sinfónica y los saberes académicos dialogan con la creación viva de la ciudad.

Verónica Pérez Traviezo
Máster Central
Bogotá, D. C., 17 de junio de 2025
Imágenes: Máster Central

Con el objetivo de promover competencias que les permitan a los futuros ingenieros desenvolverse en escenarios globales, la asignatura Organizational Dynamics, a cargo de la profesora Adriana Marcela Díaz Cepeda, ha incorporado exitosamente la práctica del bilingüismo en su enfoque pedagógico.

Esta estrategia forma parte del compromiso del programa de Ingeniería Industrial de la Universidad Central con la excelencia académica y la internacionalización de su currículo. Para lograrlo, se contó con el acompañamiento del Language Center de la Universidad Central y el apoyo de las monitorías en inglés, las cuales han brindado espacios de refuerzo académico y lingüístico para los estudiantes.

La implementación de contenidos, lecturas, presentaciones y dinámicas en inglés ha permitido que los estudiantes no solo fortalezcan su comprensión del idioma en contextos profesionales, sino que también desarrollen habilidades comunicativas clave para su desempeño en entornos laborales multiculturales.

Los resultados han sido altamente positivos. Se ha conseguido una participación activa por parte de los estudiantes, mayor motivación y una percepción favorable frente al uso del inglés como herramienta para el aprendizaje. Esta experiencia reafirma la importancia de integrar el bilingüismo en los procesos de formación profesional y puede servir como inspiración para implementarlo en otras asignaturas del programa.

Con iniciativas como esta, el pregrado en Ingeniería Industrial de la Universidad Central continúa avanzando en la formación de profesionales íntegros, competitivos y preparados para los desafíos del mundo actual.

Adriana Marcela Díaz Cepeda
Profesora de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Básicas
Bogotá, D. C., 16 de junio de 2025
Imágenes: cortesía Adriana Díaz

Cada 17 de junio se conmemora el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1994. Esta fecha invita a reflexionar sobre la importancia de mantener suelos sanos, fértiles y resilientes frente al cambio climático y las actividades humanas. Además, busca movilizar acciones colectivas e individuales para combatir la degradación de la tierra, preservar la biodiversidad y prevenir los efectos de la sequía. 

A través del proyecto UC Verde: camino a la sostenibilidad, la Universidad Central se une a esta conmemoración como parte de su apuesta por la sostenibilidad ambiental y la educación transformadora. Desde distintos espacios académicos e institucionales, la comunidad unicentralista reafirma su compromiso con el cuidado del ambiente y la promoción de prácticas orientadas a mitigar los impactos de la desertificación y el deterioro de los suelos en Colombia y el mundo.

La desertificación afecta hoy a más del 40 % de la superficie terrestre y perjudica directamente a más de 3.200 millones de personas. La degradación de los suelos compromete la seguridad alimentaria, el acceso al agua potable y los medios de vida de comunidades rurales y urbanas. 

Colombia hace parte de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD) desde 1999, un tratado internacional ratificado por 197 países que relaciona el medio ambiente y el desarrollo con el manejo sostenible de los suelos. Este acuerdo promueve estrategias de largo plazo que integran el conocimiento científico, las políticas públicas y la participación comunitaria.

En este contexto, la educación superior juega un papel estratégico, al formar profesionales con conciencia ambiental y capacidades para transformar realidades desde sus territorios.

Uno de los aportes recientes más relevantes en este campo son los Sistemas de Uso Sostenible de la Tierra (SUST), un concepto impulsado por la Interfaz Ciencia-Política (ICP) de la CNULD. Los SUST se conciben como un mosaico dinámico de usos del suelo que articula la sostenibilidad ambiental, la equidad social y la viabilidad económica, considerando las condiciones específicas de cada territorio. Desde un enfoque socioecológico y de gobernanza participativa, los SUST promueven la implementación de soluciones adaptadas a las necesidades locales, con la participación activa de las comunidades, la academia, los gobiernos y otros actores.

En un informe, la ICP también identifica desafíos clave para implementar los SUST. Entre ellos: mejorar la gobernanza, fortalecer las capacidades institucionales, superar limitaciones metodológicas, fomentar la participación inclusiva y adaptarse a los cambios ambientales y sociales.

El programa de Ingeniería Ambiental participó activamente en la 11.ª Semana Internacional de Ciencia, Tecnología e Innovación en 2024, con la ponencia oral “Selección de indicadores y sus metodologías (in situ) para monitorear la calidad de los suelos agrícolas en el municipio de Supatá, Cundinamarca”, presentada por las estudiantes Mishell Alexa Imbacuán García y Andrea Valentina Norato Fandiño.

Este trabajo, producto de las prácticas de ingeniería y en el marco del semillero de investigación Econciencia, se enfocó en el diseño y la implementación de metodologías de evaluación en campo para hacer un monitoreo edáfico con enfoque holístico. En un contexto donde predominan los análisis de laboratorio, esta propuesta innovadora promueve el uso de herramientas accesibles como la evaluación visual del suelo (EVS). Por medio de ellas, las comunidades agrícolas locales, como la de Supatá, pueden acceder a información comprensible y útil para la toma de decisiones sobre la gestión del suelo.

El semillero UC Verde también ha dado lugar a diversas investigaciones sobre calidad de suelos. Recientemente, Liseth Moreno, Heidy Rodríguez y Victoria Vallejo —del programa de Ingeniería Ambiental— publicaron el artículo “Evaluación del impacto del biocarbón en la calidad de suelos agrícolas: una revisión sistemática” en la revista académica Colombia forestal. Durante el semillero se realizó un riguroso proceso de revisión a esta investigación, a partir del cual las egresadas consolidaron su trabajo de grado.

Igualmente, una investigación de la estudiante Lyna Amaya será publicada en la revista ITTPA (Innovación y Transferencia Tecnológica para la Protección Ambiental), de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca. El artículo se titula “Evaluación de la calidad edáfica en microcosmos del suelo expuestos al glifosato bajo condiciones controladas de laboratorio” y es producto de varias etapas experimentales desarrolladas en el semillero.

Recientemente se publicó el libro Contaminación en suelos en América Latina: contribuciones al conocimiento, diagnóstico y alternativas de solución, editado por Editorial Parmenia de la Universidad La Salle (México). Esta obra representa un hito significativo en el abordaje de la contaminación de suelos por hidrocarburos en la región y ofrece una perspectiva multidisciplinaria que integra conocimientos de ingeniería, biología, geología, química y ciencias sociales.

Victoria Vallejo Quintero, docente de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Básicas de la Universidad Central, participó como autora con el capítulo “Actividades enzimáticas como herramientas para el monitoreo de la biorremediación de suelos contaminados con hidrocarburos”. En su contribución, la profesora expone cómo las actividades enzimáticas funcionan como indicadores sensibles para evaluar la salud microbiana del suelo y la efectividad de los procesos de biorremediación. Esta herramienta permite hacer un seguimiento temprano y confiable de la recuperación de suelos impactados por derrames de hidrocarburos, para poder desarrollar estrategias sostenibles de restauración ambiental.

Ante la urgencia global de enfrentar la crisis ambiental, la Universidad Central reafirma su papel activo como agente de cambio, promoviendo la investigación, la formación crítica y la articulación con las comunidades.

Las iniciativas descritas en este artículo reflejan el compromiso institucional por avanzar hacia una gestión sostenible del suelo y contribuir, desde la academia, al desarrollo de soluciones accesibles, pertinentes y con impacto social. A través de acciones concretas lideradas por estudiantes, docentes e investigadoras, la Universidad Central continúa sembrando conciencia y cultivando conocimiento al servicio del país y del planeta.

Seminario Ambiental Permanente UC Verde
Dirección del programa de Ingeniería Ambiental
Bogotá, D. C., 17 de junio de 2025
Imágenes: Freepik

Estudiantes y egresados de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Básicas de la Universidad Central participaron en la competencia RMS Challenge, que tuvo lugar entre el 1 y el 4 de mayo de este año en Mogi das Cruzes, Brasil. El torneo convoca a instituciones de todo el mundo y busca promover el conocimiento y el desarrollo de tecnologías en el campo de la robótica.

Entre los participantes de este año estuvo Andrés Zapata, integrante del Semillero de Automatización y Robótica CRAUC, recién egresado del programa de Ingeniería Electrónica y estudiante de últimos semestres de Ingeniería Mecánica, quien participó junto a siete compañeros egresados del programa de Ingeniería Electrónica.

Su asistencia fue posible gracias a los convenios de cooperación entre diferentes torneos y clubes de robótica, además del apoyo otorgado por la FICB. En RMS Challenge, el estudiante compitió en las categorías hockey, como piloto, y robot guerra, como colaborador. 

También obtuvo el tercer lugar un robot velocista construido por el profesor Ricardo Cervantes. El robot fue piloteado por los integrantes de Planeta 3D, empresa liderada por Javier Fernández, egresado de Ingeniería Electrónica de la Universidad Central.

Para Andrés, el torneo estuvo lleno de nuevos retos, pues como colaborador debía brindar apoyo rápidamente a varios de sus compañeros: “Fueron días exigentes. Todo sucedía al mismo tiempo, ya que todas las competencias se realizaron de manera simultánea, lo que complicaba estar apoyando a los compañeros y estar pendiente del llamado para la participación con los robots”, mencionó el estudiante. Sin embargo, estos desafíos le permitieron poner a prueba sus habilidades y adquirir nuevos aprendizajes.

Además, la Universidad Central participó por primera vez en varias categorías, como la competencia de hockey. En este caso, el reto fue incursionar en la construcción de este tipo de robots en específico y asimilar reglas completamente diferentes. De hecho, gracias a esta experiencia se propondrá crear las competencias de robot hockey en Colombia.

María J. Eraso E.
Profesora líder de CRAUC
Bogotá, D. C., 13 de junio de 2025
Imágenes: cortesía CRAUC

El semestre pasado, el antiguo gimnasio de la Universidad Central se transformó en un verdadero escenario deportivo. Desde las 8:00 a. m. hasta las 6:00 p. m., 95 estudiantes de 13 universidades del país vivieron mucho más que una competencia. En el torneo interuniversitario de tenis de mesa, ya consolidado como una tradición semestral, el juego, el respeto y el aprendizaje fueron el eje central.

En la UCentral, se reunieron estudiantes de diversas universidades como: Los Andes, UNAL, Rosario, FUCS, Tadeo, Piloto, EAN, Politécnico, Escuela Colombiana de Ingeniería, Sergio Arboleda, Gran Colombia y Católica. Esta diversidad de voces y talentos permitió que cada encuentro fuera también un intercambio cultural.

El evento fue organizado por la Coordinación de Deportes de Bienestar Estudiantil y tuvo el respaldo de distintas áreas de la Universidad. Su propósito fue claro: ofrecer experiencias que enriquezcan la formación personal de los estudiantes.

Así, la tensión de cada punto, la frustración ante un error y la alegría de superar una ronda se convirtieron en herramientas pedagógicas. De hecho, muchos participantes confesaron haber enfrentado miedos personales y encontrado nuevas motivaciones para seguir entrenando.

En la Universidad Central, el bienestar estudiantil no es un asunto aislado, sino que estar centrada en las personas es parte del corazón de su proyecto educativo. Por eso, las actividades extracurriculares no se consideran simples pasatiempos, sino espacios formativos donde el cuerpo, la mente y las emociones también se fortalecen.

“En un mundo donde muchas actividades se han trasladado a lo virtual, necesitamos estos espacios presenciales para compartir, conocernos y construir comunidad. Durante el torneo se siente la tensión de la competencia, pero también la nobleza en la victoria, la reflexión tras la derrota y la solidaridad entre compañeros”, señaló Alejandro.

La UCentral impulsa la participación activa en campeonatos internos, encuentros amistosos y eventos como los Juegos Distritales Ascún Deportes, donde representar a la Institución se convierte en un acto de pertenencia. Cada competencia es una oportunidad para medir avances, fortalecer habilidades y vivir el juego como un espacio ético, colaborativo y profundamente humano.

La Universidad no solo promueve estas iniciativas internamente, sino que también extiende su invitación a otras instituciones. Así, trabaja en generar una red de colaboración interuniversitaria que fortalezca los lazos entre jóvenes de diferentes contextos y programas.

La apuesta es seguir creciendo. Cada semestre, la Universidad se plantea nuevas formas de mejorar la experiencia, ampliar la asistencia y seguir brindando escenarios que fortalezcan el sentido de pertenencia, el compromiso, la disciplina y la construcción de comunidad.

En la Universidad Central, el aprendizaje no se limita al aula, sino que cada espacio es una oportunidad para crecer, descubrirse y conectar con los demás. El torneo de tenis de mesa fue un claro ejemplo de esto: más allá de los puntos en juego, todos se llevaron buenas historias y momentos para recordar.

Alison Tabares
Máster Central
Bogotá, D. C., 12 de junio de 2025
Imágenes: Máster Central 

Como parte de su compromiso con la transformación digital, la Universidad Central, a través de la Dirección de Tecnología Informática, comenzó la implementación de la automatización de procesos con RPA (Robotic Process Automation). Esta tecnología agiliza tareas operativas y repetitivas mediante robots de software, lo que disminuye las actividades rutinarias y permite enfocar los esfuerzos de los equipos de trabajo en labores más estratégicas.

La RPA consiste en usar robots de software —también conocidos como bots— para ejecutar tareas basadas en reglas definidas, como el cruce de datos, la generación de reportes o la validación de información. 

Esta herramienta ofrece beneficios como la reducción de errores humanos, la disminución de tiempos en la ejecución de procesos y el manejo eficiente de grandes volúmenes de trabajo. Además, permite que los equipos humanos se concentren en actividades estratégicas, creativas y de supervisión.

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El proceso de implementación de la automatización robótica de procesos contempla varias fases:

1. Identificación de procesos: selección de tareas repetitivas basadas en reglas.
2. Diseño del flujo de trabajo: creación de diagramas que representen cada proceso.
3. Desarrollo del bot: configuración del software RPA según el flujo definido.
4. Pruebas: verificación del funcionamiento del bot en escenarios simulados.
5. Implementación: despliegue en actividades reales.
6. Monitoreo y mejora continua: seguimiento, ajustes y recepción de mejoras.

De acuerdo con Juan Manuel Suárez, especialista de la Dirección de Tecnología Informática, la iniciativa responde a la necesidad de eliminar cuellos de botella, reducir las tareas manuales y apoyar el proceso de transformación digital institucional sin modificar radicalmente los sistemas existentes.

“Los RPA pueden trabajar 24/7, lo que se traduce en una mayor productividad para toda la Institución”, destacó Suárez.

De esta manera, la Universidad podrá priorizar tareas de alta demanda. Ejemplos de las actividades que se podrían automizar son: conciliación de información financiera, generación de reportes, migración de datos entre plataformas y soporte a procesos académicos (como preinscripciones, matrículas y validación documental), automatizaciones para desbloqueo de usuarios, reseteo de contraseñas y cargas masivas en plataformas de aprendizaje. 

La Institución hará gran énfasis en la capacitación del talento humano para la incorporación de RPA, a través de campañas de sensibilización y formación en habilidades relacionadas con la automatización.

Como explicó Suárez, el alcance de la automatización se puede evaluar con el tiempo: “La RPA permite empezar con inversiones controladas y escalables. Su complejidad no está en la tecnología, sino en entender los procesos que se quieren mejorar”.

Frente a las preocupaciones sobre la posible pérdida de empleos, Suárez fue claro: lejos de ser una amenaza, los robots se convertirán en aliados del trabajo humano, pues permitirán mayor dedicación en tareas que requieren pensamiento crítico, creatividad y contacto interpersonal. “Las instituciones que acompañan este cambio logran que el personal vea a los robots como aliados, no como amenazas”, señaló. 

Paola Canastero
Máster Central
Bogotá, D. C., 11 de junio de 2025
Imágenes: Freepik

El receso académico es una oportunidad para descansar, recargar energías y dedicar tiempo a lo que te gusta, pero también es un momento en el que pueden aparecer riesgos inesperados. Por eso, estar atentos y prepararnos para este tipo de situaciones puede hacer una gran diferencia. Esto no significa vivir con miedo, sino contar con herramientas para disfrutar con seguridad.

Estas son algunas recomendaciones clave para que puedas tener tranquilidad en la época de vacaciones:

Estar en comunicación con tu red cercana puede ser clave ante cualquier eventualidad.

Conocer el entorno al que te diriges te permitirá disfrutar con tranquilidad.

El instinto puede ser una de nuestras mejores herramientas ante situaciones desconocidas.

La tecnología puede ser una gran aliada para tu protección.

Con las vacaciones, pueden surgir nuevos retos emocionales o intensificarse aquellos que se venían acumulando.

En la Universidad Central, tu bienestar es una prioridad dentro y fuera del aula. Las vacaciones son una oportunidad para descansar, recargar energías y cuidar de ti. Sigue estas recomendaciones para disfrutar un receso seguro, tranquilo y renovador. ¡También en vacaciones, tu bienestar cuenta!

Dirección de Bienestar Estudiantil
Unidad de Estudiantes y Egresados
Bogotá, D. C., 10 de junio de 2025
Imágenes: Freepik

A finales de 2024, la editorial Aula de Humanidades publicó Derrumbar al musicstar, de los profesores Andrés Felipe Niño Sanabria y Luz Dalila Rivas Caicedo. El libro estudia el mercado laboral y los programas de formación profesional en música que se ofrecen en la capital del país y se presentó este año en la Feria del Libro de Bogotá. Para la investigación, los autores consultaron a casi 300 personas que hacen parte del sector musical en la ciudad, incluyendo músicos, docentes, agentes, entre muchos otros actores.

Gracias a ello, identificaron la necesidad de repensar la lógica bajo la cual se plantean los programas de educación superior y contemplar la formación desde y hacia una perspectiva amplia de la profesión y sus diversas ocupaciones laborales. Así, es posible brindar a los estudiantes conocimientos que les permitan integrarse efectivamente al mercado laboral, como producción, composición y propiedad intelectual, entre otros.

Por musicstar, los autores hacen referencia a una figura romantizada del músico e intérprete, que no necesariamente se corresponde con la realidad. “Es ese instante fugaz en el que el músico está en el escenario y toca el cielo por una o dos horas. Pero luego tiene que bajar y reconfigurarse emocionalmente para estar en el mundo real”, explicó Andrés Felipe Niño Sanabria.

Esa idealización puede venir de las personas fuera del sector musical, pero también es producto de cómo se ha configurado la figura del músico en los espacios de formación. “El mismo músico a veces cree que la interpretación y la composición son el pináculo del éxito, cuando en realidad el campo es multidisciplinar”, precisó Niño.

Ante este panorama, los autores empezaron a cuestionar la formación superior que por tradición se ofrece en el país. En principio, el interés surgió de su experiencia como músicos. Según explicó Andrés Felipe, “la investigación surge de un proceso muy personal, pero también luego de observar la misma sensación en un gran número de músicos que está movilizando el escenario cultural en Colombia”, pues en ocasiones, al terminar su formación, no cuentan con las herramientas para hacer de su conocimiento una fuente de ingresos.

Una vez sembrada la semilla, explicó Luz Dalila, la investigación tuvo cuatro etapas:

• Revisión del contexto: se construyó un marco crítico sobre la formación musical, analizando antecedentes a nivel global, latinoamericano, nacional y local.

• Trabajo de campo: se identificaron 12 programas de formación musical en la ciudad y se consiguió la participación activa de nueve de ellos.

• Recolección de datos: se aplicaron encuestas saturadas a más de 260 personas y se organizaron cuatro mesas de trabajo (que pueden consultarse en Youtube), con 34 participantes entre docentes, estudiantes, egresados y agentes del sector.

• Análisis y sistematización: a partir del material recolectado, se consolidó un diagnóstico participativo que dio origen al libro, haciendo énfasis en los desafíos actuales de la educación superior en música.

Así, la investigación buscó conocer las percepciones de estudiantes, profesores, gestores, productores y demás agentes del medio musical en Colombia. Queríamos dar respuesta a cómo va a hacer el país para enfrentar lo que está pasando mundialmente, señaló Andrés Felipe.

Como explicó Andrés Felipe, “en el ámbito académico se está viviendo una transformación de una sociedad académica a una profesionalizante; las universidades en Colombia deben observar estas transformaciones para poder atraer gente que se quiere mover en el espacio de la música desde un lugar más polimorfo”.

En ese sentido, es importante que la academia y el sector laboral reconozcan al músico como un sujeto económico y como gestor de su propia obra. De acuerdo con Luz Dalila, en la formación curricular “se deben incorporar propiedad intelectual, producción musical, distribución digital y gestión de proyectos formativos. Además, hay que promover el diálogo interdisciplinar, pues el músico de hoy debe interactuar con saberes legales, técnicos, comunicacionales y económicos”.

Además, Andrés Felipe destacó la importancia de la agremiación para el sector musical. Esta puede ser una herramienta útil a la hora de defender los derechos desde el área cultural y también tiene implicaciones en el ámbito educativo, pues quienes ahora son estudiantes luego serán colegas. Por tanto, se debe tener una conversación amplia que incluya a todos.

La Universidad Central es consciente de las transformaciones que están surgiendo en el campo musical. En respuesta, como señaló Luz Dalila Rivas, “desde la Escuela de Artes y el programa de Estudios Musicales se ha aprobado una reforma curricular que piensa en un nuevo perfil del egresado”.

Otro asunto clave es la incorporación de herramientas digitales. Que también está siendo contemplada en la reforma. “Se ha ido trabajando para tener aulas especializadas en audio y posproducción que cuenten con software de alta calidad. Además, el programa piensa en la tecnificación del músico, otorgándole herramientas de audio, producción y posproducción de sonido”, explicó Andrés Felipe.

Por último, la UCentral hace una apuesta por la investigación, pues reconoce el esfuerzo que se ha hecho en esta dirección desde el programa académico. “Queremos que la profesionalización de la música se vea desde la creación. Con esta reforma, le apostamos a una investigación-creación formativa en donde los estudiantes aprendan a crear desde la indagación propia del contexto social en que se mueven y desde sus propios arquetipos creativos. Buscamos que la Universidad responda a las necesidades del siglo XXI”, explicó Niño.

Haber realizado esta investigación también ha impactado la manera en que ambos se acercan a su labor docente. Para Luz Dalila, “uno de los cambios más importantes ha sido invitar a los estudiantes a desescalar esa visión jerárquica que ubica la interpretación como único camino de éxito. Es necesario visibilizar otras trayectorias valiosas que han transitado músicos en campos como producción, gestión, investigación/creación o creación interdisciplinar”.

Al respecto, Andrés Felipe Niño destacó que los estudiantes han venido asimilando la transición hacia un lugar multidimensional del músico, donde no solamente tocará, sino que también compondrá, producirá y podrá gestionar lo que está creando. “Los estudiantes han observado que eso es importante, pero también cuesta desescalar la noción del intérprete virtuoso como el único lugar de éxito. Por eso queremos apostarle a formar un músico que pueda salir a hacer música, pero con conocimiento de lo que necesita para poder hacerla”. 

Andrés Felipe Hernández Carrero
Máster Central
Bogotá, D. C., 3 de junio de 2025
Imágenes: cortesía de Luz Dalila Rivas y Andrés Felipe Niño

La red de familias unicentralistas promueve estrategias de educación y sensibilización dirigidas a la comunidad educativa, para que, desde sus respectivos roles, se puedan acompañar de manera activa situaciones propias de los y las estudiantes durante su paso por la vida universitaria.

En línea con el objetivo de ser una Universidad centrada en las personas, esta iniciativa reconoce a la familia como un aliado estratégico para afrontar problemáticas emocionales, académicas y psicosociales. Por ello, el área de Bienestar Estudiantil, a través de su trabajadora social Vivian Fernández Cristancho, lidera talleres que abordan temas clave como: habilidades blandas, salud mental, ciberseguridad, educación financiera, resolución de conflictos y comunicación asertiva, entre otros.

La red se estructura a partir de dos líneas de trabajo: una formativa y otra vivencial. La primera ofrece espacios académicos enfocados en el desarrollo personal y social, como capacitaciones, talleres y encuentros mensuales. La segunda propone actividades culturales y deportivas para generar espacios de encuentro que fortalezcan alianzas internas y externas estratégicas en pro del bienestar de los estudiantes y sus familias. En algunos casos, las actividades se desarrollan en articulación con entidades externas del ámbito de la salud y el acompañamiento psicosocial. 

Además se busca que las problemáticas individuales puedan abordarse de manera colectiva y eficaz, en un ambiente de confianza y fraternidad, que consolide una red de apoyo articulada y funcional entre las familias y la Institución.

“Queremos extender una invitación a nuestros funcionarios, a las familias unicentralistas y los estudiantes para que participen en los talleres que realizaremos en el segundo semestre de 2025. Esta es una nueva oportunidad para seguir construyendo juntos el camino de nuestros futuros profesionales unicentralistas”, concluyó Vivian Fernández.

Si quieres conocer las actividades que realiza la red de familias unicentralistas, mantente al tanto de Agéndate con la UC y de tu correo electrónico institucional.

Paola Canastero 
Máster Central
Bogotá, D. C., 30 de mayo de 2025
Imágenes: Freepik

La Universidad Central obtuvo un importante reconocimiento al ganar la convocatoria de Proimágenes Colombia para desarrollar el proceso de formación destinado a los ganadores de la categoría de guion de cortometraje del Fondo para el Desarrollo Cinematográfico (FDC) 2024. La propuesta ganadora, denominada “Laboratorio de Reescritura de Cortometrajes para beneficiarios de la convocatoria FDC 2024”, no es solo un espacio de formación, sino un punto de encuentro donde se está forjando el futuro del cine colombiano.

El programa de Cine de la Universidad Central presentó una propuesta formativa que destacó entre los demás participantes por su claridad metodológica, innovación pedagógica y alta calidad profesional de su equipo de tutores. Este logro institucional confirma el nivel de excelencia académica que caracteriza a nuestra Universidad en el campo de la formación audiovisual.

El cine colombiano no solo captura historias, sino que preserva la identidad de un país en constante evolución. Detrás de cada imagen en movimiento hay un esfuerzo colectivo por fortalecer una industria que impulsa la creatividad y refuerza la memoria cultural. En este escenario, Proimágenes Colombia desempeña un papel fundamental, no solo como impulsor de la producción audiovisual, sino del patrimonio cinematográfico nacional.

A través del Fondo para el Desarrollo Cinematográfico (FDC), la entidad transforma ideas en proyectos concretos, brindando apoyo financiero y formación especializada que eleva la calidad de las producciones. Más allá de la financiación, el FDC canaliza voces que buscan expresión. Su más reciente apuesta, en 2024, abrió una nueva puerta para la creación.

El proceso formativo cuenta con un equipo de destacados profesionales del cine: Carla Melo, directora seleccionada en el Festival Cannes con su cortometraje animado La perra; Sebastián Quebrada, director de El otro hijo; Mauricio Leiva, uno de los grandes guionistas de Netflix y Amazon; Patricia Ayala, documentalista con trayectoria internacional; Andrés Mossos, experto en narrativa audiovisual, entre otros. Este sólido equipo garantiza que los participantes reciban una formación de alto nivel, que combina el rigor académico con la experiencia práctica en el campo del cine.

El laboratorio se desarrolla de manera remota desde el 12 de febrero hasta el 12 de mayo de 2025. “Son, en total, 34 cortometrajes beneficiarios, entre relatos regionales, corto nacional y étcnico-infantil. Lo que nosotros hicimos fue presentar una propuesta a Proimágenes de cómo iba a ser el desarrollo pedagógico”, explicó el profesor Andrés Mossos, quien encabeza la iniciativa desde el programa de Cine. Agregó que se trató de una convocatoria por invitación, hecha directamente desde el FDC para que la Universidad se postulara. 

El profesor destacó que los participantes provienen de diversas regiones de Colombia, lo que enriquece el intercambio de experiencias y perspectivas. El proceso formativo incluye clases magistrales sobre escritura para la producción, talleres de creación y desarrollo de personajes, sesiones sobre estructuras dramatúrgicas, metodologías de investigación para reescritura de guiones y asesorías grupales e individuales. “El objetivo del laboratorio es acompañar a los creadores en todo el proceso de reescritura de los guiones y otorgar herramientas nuevas para ello”, dijo Mossos.

Ganar esta convocatoria representa una oportunidad invaluable para la Universidad Central, ya que fortalece los vínculos con el sector profesional del Cine, abre puertas para futuras colaboraciones con Proimágenes Colombia, enriquece los programas académicos con nuevas metodologías y experiencias, y amplía las oportunidades para nuestros estudiantes y docentes. 

Para Sandra Ruiz, directora del programa de Cine, el Laboratorio de Reescritura de Cortometrajes para beneficiarios de la convocatoria FDC 2024 evidencia que la UCentral constituye un referente de formación en todos los ámbitos cinematográficos en Colombia y ayuda a que la Institución logre mayor visibilidad dentro del sector. “Uno de nuestros objetivos es el impulso cinematográfico del país”, mencionó.

Al ganar esta convocatoria, nuestra Institución asume la responsabilidad de contribuir a la formación de los nuevos talentos del cine colombiano, aportando al fortalecimiento de una industria audiovisual que refleje la diversidad y riqueza de nuestra identidad nacional.

Alison Tabares
Máster Central
Bogotá, D. C., 25 de abril de 2025
Imágenes: Máster Central