Los programas de Estudios Musicales y de Cine de la Universidad Central desarrollaron el evento Ver música, oír cine.
Con Ver cine, oír música,sus organizadores pensaron en un evento para debatir y a la vez mostrar cómo trabajan en conjunto la imagen y el sonido en diferentes líneas artísticas. En esencia, durante su desarrollo se trataron de exponer los diferentes puntos de vista y comunicar las distintas experiencias de profesionales inmiscuidos en el tema del sonido en el cine y de la imagen en la música.
En esta oportunidad se proyectó un fragmento de uno de los trabajos del director de cine y director del Departamento de Cine de la Universidad Central, Lisandro Duque, y la exposición de Gustavo Lara, del Departamento de Estudios Musicales, para dejar abierto el debate entre los invitados y participantes.
Gustavo Lara enfatizó en la importancia de los compositores a la hora de musicalizar un trabajo cinematográfico, puesto que constituye un arduo trabajo entender el carácter de lo que el creador quiere decir y traducirlo a sonidos; también resaltó el cuidado que se debe hacer en el acompañamiento de la imagen para evitar la fragmentación de las ideas.
En este conversatorio también se debatió acerca de los problemas del lenguaje entre "músicos ciegos" y "cineastas sordos" y la distinción entre la comunicación de cada una de las partes profesionales en la composición de una pieza artística, sea musical o cinematográfica. Alberto Tamayo, uno de los invitados externos, expuso acerca del compromiso que debe tener el compositor con la música y con el trabajo en conjunto para el éxito de una obra.
Otra de las dudas que surgió en este debate está relacionada con la comprensión del lenguaje y las jerarquías que se presentan a la hora de producir o componer para cine. También se habló de la importancia en la preparación académica que músicos y cineastas deben tener para trabajar en las formas de producción de cinematográfica a musical y viceversa.
"Éste fue un encuentro felizmente inconcluso", dijo el maestro Lisandro Duque, quien dejó abierta la posibilidad de otros encuentros en distintos escenarios para la discusión, divulgación y admiración de música y cine.
