Servicios
Universidad Central

Noticentral

¿Para qué sirve un robot?

Luchas cuerpo a cuerpo, carreras de velocidad, pruebas de destreza física y desafíos para recolectar objetos en tiempo récord fueron algunas de las competencias del 2.° Megatorneo Runibot, que se realizó en el Teatro Faenza de la Universidad Central.

competencia de robots
Competencia de robots en la categoría Velocista Colegios

 

En general, las personas asociamos la palabra robot con algunos personajes populares del cine y la televisión: Terminator, C-3PO, R2D2, Robotina, Optimus Prime y Bender. Sus historias son nuestra ventana al mundo de la robótica, que siempre parece un asunto de ciencia ficción o de tecnología ininteligible, ante software o máquinas que cumplen algunas tareas que ejecutan los seres humanos.

Sin embargo, en la práctica, los robots suelen implementarse en tareas de riesgo, repetitivas o de mucha precisión, como la desactivación de bombas, la exploración espacial o la producción industrial.

icono-marketing2

Un robot lleva una copa de agua por terrenos irregulares, sin regarla. Una cámara identifica los movimientos de una persona con marcadores electrónicos en el cuerpo. Un celular tiene doble cámara HD, lector de huella y batería de larga duración. Diseñar y fabricar dispositivos como estos es uno de los desafíos de nuestra carrera de Ingeniería Electrónica.Para conocer más sobre este pregrado haga clic aquí.

En Colombia –a diferencia de Japón o Estados Unidos– este campo es incipiente, aunque la temática no es ajena a la academia. Eso lo demuestran los distintos grupos de investigación que abordan esta técnica y se han destacado en eventos internacionales que ponen a prueba este conocimiento y la capacidad de diseño tecnológico. Propósitos con los que la Red Universitaria Bogotá Robot (Runibot) realizó el 2.° Megatorneo Runibot que este año celebró su segunda edición.

El certamen reunió a competidores nacionales e internacionales que se enfrentaron en diferentes categorías: Robot velocista, Robot velocista colegios, Robot sumo, Robot minisumo, Robot social, y Desarrollo, investigación e innovación en robótica.

"México, Perú y Ecuador, además de Colombia, fueron los países participantes en esta competencia que aumentó, en relación con la primera edición, el número de competidores. Tuvimos 33 equipos de colegio, 36 equipos de universidades y 2200 visitantes", señala María Jesús Eraso España, docente del Departamento de Ingeniería Electrónica de la Universidad Central, parte del equipo organizador de Runibot.

El carácter universal del torneo fue reforzado con la presencia del señor Takeshi Kanai, presidente de uno de los concursos de robótica más importantes a nivel mundial, el All Japan Robot Sumo Tournament, quien afirmó: "La forma más viable de fortalecer la robótica es a través del apoyo a las Universidades y al talento. Por lo que pude ver en este torneo, los estudiantes de ingeniería japoneses y los colombianos tienen el mismo nivel, pero la única forma de incentivarlos y de que Colombia crezca en el campo de la robótica es que el gobierno crea en los jóvenes y en estos proyectos y los apoye económicamente, con nuevas plataformas, investigaciones y laboratorios".

Entre 70 y 500 mil pesos y dos meses de trabajo invirtieron algunos de los participantes del torneo para el desarrollo tecnológico de los prototipos, que en su funcionamiento demuestran las bases y fundamentos del campo de la Ingeniería electrónica. "La idea era crear prototipos que transitaran por una pista de manera autónoma –sin control remoto–, reconocieran materiales, combatieran entre ellos, y realizaran tareas mecánicas", opina Nicolás Malagón, estudiante de Ingeniería Electrónica de la Universidad Central, integrante del equipo organizador del torneo.

Miguel Ramos y Mauricio López participaron en la categoría Minisumo y destacaron del evento la posibilidad de "aplicar el conocimiento en el tema de la interdisciplinariedad entre electrónica, programación y mecánica". Diseñar el robot, hacerlo funcionar, crear e integrar todos sus componentes, fueron parte de la motivación para participar.

En Minisumo, los robots, por pareja, con un área de 10 x 10 cm2 y un peso de 0.5 kg; se enfrentan en una pista y a través de sensores de ultrasonido, que se activan cuando el oponente está cerca, se abalanza uno sobre el otro y en la lucha intentan sacarse del área de combate.

La categoría Robot social reunió los prototipos que cumplen una función de reciclaje: recolección y clasificación de objetos de metal y de plástico durante el recorrido de una pista (cuadrícula) que simula una ciudad. Para este propósito, Armando Figueredo, Jhon Bustos y Diego Manrique desarrollaron un robot que además de seleccionar y recoger los objetos, los almacena en un contenedor según el color del cual están hechos, y que determina el material. "Este prototipo no selecciona material sino color. Los objetos metálicos los califica con el color negro y los de plástico con el rojo", señala Diego Manrique, otro estudiante que ha incursionado en el campo de la robótica.

Este diseño de sistema autónomo se perfila con una utilidad real para la comunidad. Sus creadores lo piensan como una caneca de basura que podría realizar un proceso de reciclaje con botellas de vidrio y plástico, por ejemplo.

Con la categoría Robot velocista colegios, se estimuló la participación de jóvenes estudiantes para fortalecer e incentivar las competencias relacionadas con diseño, lógica, construcción de diferentes mecanismos y aplicación de los conocimientos sobre matemática, física y mecánica, etc., adquiridos en la escuela; además del trabajo en equipo y el sentido de pertenencia por la institución a la que representaron.

Para Jerónimo Escobar, de diez años de edad y perteneciente al grado 4A de la institución Corporación Colegio San Bonifacio de las Lanzas de Ibagué, el Megatorneo fue una gran oportunidad para aplicar sus conocimientos y compartir con sus compañeros de clase: "Fue muy divertido pues todos estábamos en grupo armando los robots. Además sentíamos muchas ganas de participar porque queríamos sentir la emoción de ganar y aprender más. En el colegio hay compañeros que solo les gusta el fútbol. Nosotros nos metimos a robótica para poder hacer cosas nuevas".

El Hacker, como se llama el robot del pequeño Jerónimo, fue construido con el programa Robotprog, un software de programación dirigido a los estudiantes de básica primaria. "El profe nos enseñó cómo programarlo con el Robotprog. Desde ahí mandamos todo al microcontrolador del robot y lo armamos durante un mes", explica.

El torneo contó con una logística que permitió mejorar el conteo de tiempo y puntaje mediante un software contador, que garantizó transparencia y precisión en los resultados de la calificación. "Dejamos atrás el uso del cronometro, el lapicero y el papelito. Agilizamos el proceso de conteo de tiempo por medio de un circuito automático, que da el puntaje y el tiempo y que envía los reportes a un computador", establece Malagón.

El aspecto innovador de este evento permitió acercar la robótica a la comunidad académica y al público en general, así como conocer la labor de otras universidades, grupos de trabajo y países, socializar en el campo de la electrónica y especializar aún más los robots. Al respecto, la profesora Eraso señala: "Colombia debe responder a las expectativas económicas y comerciales que la globalización exige. Por eso, la robótica competitiva es el paso inicial al desarrollo de la robótica industrial; así, los estudiantes interesados en esta área serán los futuros diseñadores e implementadores de los sistemas de automatización y control para las necesidades de la industria, o para cualquier sector económico que lo requiera".

A su vez, Takeshi Kanai, se refirió a los diferentes usos que este tipo de desarrollos tecnológicos pueden tener: "Hay una diferencia de desarrollo entre Japón y otros países como Estados Unidos. En Japón se desarrolla porque hay necesidades, por ejemplo servir de ayuda en procesos médicos mediante prótesis humanoides, mientras en Estados Unidos se ha usado el desarrollo tecnológico como una herramienta para la guerra".

La Red Universitaria Bogotá Robot (Runibot) está conformada por las universidades Central, El Bosque, Católica, Cooperativa de Colombia, Uniminuto y CIDCA. El 2.° Megatorneo Runibot, se realizó entre el 22 y 23 de abril en el Teatro Faenza de la Universidad Central.

Categoría Total participantes Ganador País
Desarrollo, investigación e innovación en robótica  5 Universidad Católica  Colombia
Robot social  8 Egresados Universidad de los Andes  Colombia
Minisumo  37
Instituto tecnológico Superior de Poza Rica
 México
Sumo  37 Benemérita Universidad Autónoma de Puebla  México
Velocista  52 Escuela Superior Politécnica de Chimborazo  Ecuador
Velocista colegios  76 Colegio Rodrigo Lara Bonilla  Colombia

 

Leidy Dayana Castaño Gómez
Coordinación de Comunicaciones
Bogotá, D. C., 12 de mayo de 2015
Imágenes: Departamento de Comunicación y Publicaciones

Última actualización: 2019-09-04 15:21