El 24 de octubre tuvo lugar un encuentro literario en torno a la novela La pérdida del Dorado de V.S Naipaul.
Estudiantes y docentes del programa en Creación Literaria, la especialización en Creación Narrativa y el Taller de Escritores, así como público en general, se reunieron en torno a la novela La pérdida del Dorado de V.S Naipaul, el pasado miércoles 24 de octubre en el Auditorio Fundadores del Teatro México.
En esta ocasión, la acostumbrada proyección audiovisual sobre la vida y obra del autor con la que se inicia este evento, cambió su dinámica por un ejercicio de lectura silenciosa con el cual los asistentes tuvieron la oportunidad de acercarse al autor leyendo una entrevista realizada por el escritor y reseñador colombiano Max Vergara Poeti a Vidiadhar Surajprasad Naipaul, reconocido escritor británico de origen hindú, nacido en la Isla Trinidad en 1932, premio Nobel de Literatura en 2001 y autor de la obra La pérdida del Dorado.
En esta entrevista, el autor habla sobre los motivos de su obra, revela sentimientos sobre lo que fue su búsqueda de la escritura en Trinidad, desanimado por una existencia simple en medio de una sociedad agrícola y colonial, que sumada a los conflictos morales que conllevaba pertenecer a una familia de tradición hindú en tales circunstancias, lo impulsó a continuar su formación en Oxford, a donde fue específicamente a licenciarse en literatura, movido por su imperiosa necesidad de ser escritor; además expresa sus conclusiones sobre este arte, luego de muchos años de escritura y libros publicados.
Los expositores, Roberto Burgos Cantor, Joaquín Peña y Óscar Godoy, docentes del Departamento de Humanidades y Letras, dialogaron sobre estos temas, y hablaron a los asistentes sobre cómo la obra de este autor nació a partir de su experiencia de vida, desde la falta de identificación con su entorno y el deseo de abandonarlo, puesto que no le ofrecía las condiciones para su desarrollo intelectual y ético, por lo cual el desarraigo psicológico que persiste en un mundo mezclado y complejo se convirtió para el en la respuesta a la búsqueda de un tema sobre el cual escribir. Respuesta que, paradójicamente, como sucede en La Pérdida del Dorado y algunos otros libros, lo llevó nuevamente al lugar del que en otro tiempo quiso huir, pero que ahora regresaba a el como un universo lleno de secretos, que se descubría ante sus ojos y le daba la oportunidad de explorarse a sí mismo, de encontrar su propia voz, inspirado en los cuentos de su padre y en la picaresca española junto con "esa mezcla de observación, folclor, recortes periodísticos y memoria personal" en un formato cuya originalidad no era considerada escritura en aquel momento.
Los expositores también reflexionaron sobre el hecho de si V.S Naipaul es un escritor que ofrece una lectura distinta a aquellos que también quieren escribir, puesto que una buena parte de su vida estuvo intensa y exclusivamente ligada a la búsqueda de un 'sobre qué escribir'. Propósito que se refleja, sin duda alguna, en sus libros en los que "el lector que escribe puede encontrar destellos que iluminan sus propias búsquedas y puede acercarse a los misterios de la creación literaria" como afirmó el maestro Roberto Burgos Cantor, quien también habló a los asistentes sobre cómo esta incógnita impulsa al novel escritor a preguntarse cuál es verdaderamente su mundo, a investigar, a observar y a estar atento a todas aquellas cosas poco evidentes, a lo hechos velados que se convierten en temas de reflexión y de dónde nacen las historias que nadie ha contado antes. Pues, según comentaba el profesor "el mundo está llamando al escritor para que sea escrito".
Así llamó Trinidad a Naipaul, después de mucho tiempo de haberse marchado para buscar un mundo distinto, aquello que en ese entonces el consideraba mundo y que finalmente no fue otra cosa que un refelejo de aquella isla y una herramienta para volver a ella de otra manera y comprenderla, descubrirla, y con esto descubrirse a sí mismo a partir de observar sus conflictos, su complejidad social e histórica, sus gentes; pues como afirmaron los expositores "la historia se escribe más por lo que se omite que por lo que se dice".
Así, con sus libros Naipaul responde al que para él es el único llamado noble de la vida: la escritura, "Porque trata la verdad" ya que como el mismo autor afirma "Uno debe buscar las formas de abordar la propia experiencia. Tiene que entenderla y entender asimismo al mundo. Escribir es un constante deseo de lograr un entendimiento más profundo".
En la búsqueda del Dorado, según comentaron los expositores, el autor incluye gran parte de su investigación sobre el pasado colonial de Trinidad, sobre personajes como Raleigh y Miranda y enriquece la historia, como en la mayoría de sus obras, con una narración astuta sobre el intento del imperio británico por levantar una rebelión contra el imperio español, con lo cual se observa la influencia de su vida y su pasado en Trinidad para la creación de una obra en la que se encuentra, como concluyó el profesor Joaquín Peña, que "para el conquistador dónde no había prodigio no había nada"
De está manera quedó abierto el diálogo en esta sesión de Noche de Narradores sobre la obra de V.S Naipaul, un diálogo que luego se traslada a las aulas de clase de los diferentes programas en creación literaria de la Universidad Central para continuar con su propósito de formar profesionales en el ejercicio de la escritura.