Ángela Reyes Quintero, del programa de Comunicación Social y Periodismo, está trabajando con la población de Becerril, Cesar, como parte de su pasantía en el programa 'Manos a la Paz'.
A un paso de ser profesional se encuentra Ángela Reyes Quintero, estudiante de noveno semestre, del programa de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad Central, quien hoy tiene más claro que nunca, que su trabajo estará siempre al servicio de la comunidad. Ese fue su principal motivo para hacer parte del programa ´Manos a la Paz´.
Ángela se presentó a la quinta convocatoria nacional de Manos a la Paz, realizada por la Alta Consejería Presidencial para el Posconflicto y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD; adelantó el proceso de selección en el cual cumplió con los requisitos establecidos por el programa: postulación, aval de la Universidad, superación de las pruebas psicotécnicas y participación en los talleres de inducción temática.
Hoy se encuentra desde Becerril, en el departamento de Cesar, haciendo lo que más le gusta: “poniendo en práctica mi carrera y ayudando a construir un mejor país”.
Fue asignada a la oficina de Planeación de la Alcaldía Municipal de Becerril, desde donde realiza actividades de producción y posproducción de material audiovisual, entrevistas, diseños de logos, animación y acompañamiento para visitas a comunidades vulnerables. Su primera entrega, fue la producción y posproducción de vídeos institucionales, algunos para ser divulgados en diferentes medios de comunicación municipales y regionales. Su pasantía concluirá el mes de julio.
Hasta la fecha, su trabajo ha logrado impactar a 38 estudiantes del colegio municipal –Ángela María Torres– y a 100 jóvenes del barrio Villaluz, quienes participan actualmente en la convocatoria de un proyecto que busca incentivar su participación política y liderazgo juvenil.
Ángela quiere dejar en alto el nombre de la Universidad Central y que su trabajo sea recordado por las acciones que aportan a la construcción de un mejor país. “Manos a la Paz me brinda la posibilidad de mirar el enfoque que le quiero dar a mi carrera, además de compartir mi experiencia con una comunidad que le tocó vivir de cerca el conflicto armado”, asegura.
La participación de la UC en este tipo de programas es un ejemplo más del compromiso de la Universidad con el país, a través de la formación integral de jóvenes capaces de construir paz y aportar al desarrollo de las regiones azotadas por la violencia.
